Los embarazos de alto riesgo son los más propensos a sufrir complicaciones durante la gestación y después del parto, por lo que es esencial que tanto la mamá como el bebé se encuentren bajo un control completo y detallado.


Es posible que el embarazo de alto riesgo se presente por alguna condición médica antes de concebir al niño; sin embargo, también puede desarrollarse durante la gestación y por otros factores.


¿Cómo cuál? Las enfermedades crónicas aumentan la posibilidad, la presión alta, diabetes e incluso la obesidad, entre muchas otras. Por ello, es importante llevar un estilo de vida sano.


Por supuesto, la edad de la mujer influye, por ejemplo, tener menos de 15 años o más de 40 facilita el embarazo de alto riesgo. La debilidad de las mujeres demasiado delgadas es propicia a desarrollar esta situación, por lo que es importante acudir con un especialista para minimizar las posibilidades.


Lógicamente, el consumo de drogas, el tabaco y el alcohol afectan directamente al embarazo. ¡No esperes una situación desafortunada y aléjate de las adicciones si deseas una gestación sin problemas!


Contacta a la Dra. María Guadalupe Sánchez Ruíz y recibe una consulta de valoración para llevar un correcto control de embarazo.